Como
doy por sentado que mi reputación ya está por los suelos algunos pensarán que
me cuesta muy poco dar pábulo a este (probable) infundio.
Pero lo cierto es que, al igual que a la persona que me lo ha enviado, mi sentido
común y mi carácter me invitan a darlo por no recibido y, desde luego, a no
contribuir a su propagación.
Pese a ello he decidido “entrar
al juego” y dar curso a este cuento de terror (democrático).
El
asunto es tan ruin y tan nauseabundo que,
escarmentado por la realidad (y el crescendo) de las últimas tropelías político-judiciales,
mucho me temo que pudiera llegar a ser cierto.
Lo
transcribo tal cual me ha llegado.
Y
pido disculpas por esta patente falta del mínimo rigor.
Pero
es que, el asunto da miedo (y asco).
Si
algo así asomara en el horizonte debiéramos conjurarnos para impedirlo a toda
costa.
Saludos.
INMINENTE LEY “FELIPISTA” DE PUNTO FINAL
Está circulando como la pólvora por los intra-pasillos y despachos de
medios informativos.
El motivo “autentico” de la abdicación del Borbón no
es otro que el pacto que alcanzaron la Casa Real-Rajoy-Rubalcaba-PP-PSOE de
encontrar un pretexto que ponga fin a las investigaciones y condenas que se
están produciendo con los miles de casos de corrupción que nos han asolado.
Una, sin paliativos, “Ley de Punto Final”, que apoyada en una amplia
trompetería sobre la magnanimidad del nuevo monarca cerraría todos los procesos
abiertos en caso como “Gurtel”, “ERES”, “Bárcenas”, “Blesa”, “Preferentes”,
“Arena” “Noos” “Urdargarín-Infanta”, aunque adornándola con el cierre de
sumarios de detenidos por el 22-M, “participantes en piquetes informativos” y
“madre que quemó al violador de su hija”, etc. como demagogia de
distracción.
La cobertura informativa se apoyaría en la ley de indulto de 1977, del
ahora abdicado monarca, pero que dejaría en la calle, sin condena y de rositas
a personajes como Fabra, Bárcenas, Camps, Crespo, Matas, “El Bigotes”, Lanzas,
Blesa y cerrados todos los posibles procesos contra Aznar, Magdalena Álvarez,
Chaves, Griñán…
Por eso el PSOE se ha mostrado tan entusiasta con la sucesión
monárquica… a pesar de “sus hondas raíces republicanas”.
Aznar, asistente a la boda de su amigo Blesa, se mostró eufórico
en la misma, asegurando al contrayente que todo iba a salir bien y las primeras
declaraciones Julio Anguita tras conocerse la abdicación fueron referirse a una
“Ley de Punto Final”.
¡Oído al parche que no sólo no va a haber pan para tanto chorizo,
sino que los chorizos y las morcillas nos vas a rodear por las calles y el aire
que mal respiremos!