Tras guardar 10 días de luto y pesada (in)digestión de los resultados
electorales, recurro a este, topico y tramposo, titular por dos razones bien
distintas (Aparte de intentar llamar la atención del personal):
La primera y menos importante es intentar ver si, aunque sea
vaticinando lo que, casi seguro, ocurrirá (y no me gusta) mis acreditadas dotes
de “gafe” tuercen el destino y una vez más ocurre lo contrario de lo que
vaticino (que ya me gustaría).
Y la segunda razón, que es, al menos para mí, la
verdaderamente importante es que, aunque no vaya a ocurrir, creo que es un buen
motivo de reflexión el preguntarnos por qué la gran mayoría de los partidos a
los que hemos votado van a permitir que gobierne nuestro país un personaje
indecente que preside un partido indecente sin establecer un cinturón sanitario
que le obligue a gobernar (si es que puede) unicamente con el apoyo de sus 137
Diputados y sus 7.905.185 votantes.
Por una mera cuestión de higiene democrática todos los demás
partidos deberían rehusar entablar ningún tipo de diálogo, ni mucho menos
negociación, con un ciudadano presuntamente corrupto que preside un partido imputado
en muchos casos de corrupción y debieran negarse a abstenerse o ausentarse (y
mucho más a votar a favor) de la investidura como Presidente de Gobierno de un
personaje de la catadura moral de D. Mariano Rajoy Brey.
Y con ello no estoy despreciando a sus 7.905.185 votantes.
Son el partido más votado y el que más escaños ha obtenido; Pero opino que los 16.254.898 ciudadanos que hemos votado a otros
partidos debiéramos exigir a nuestros respectivos (y derrotados) candidatos que
nieguen su colaboración a la legitimación de un corrupto apoyado en un partido
corrupto.
Y que no nos vengan con el cuento del vacío de poder, porque
sin temor a equivocarnos es muy probable que el no haber tenido un gobierno “sin
bozal” durante estos cuatro meses nos haya ahorrado muchos disgustos y trapacerías.
Si los 213 Diputados de los 11 partidos partidos, que no son
el PP, votasen en contra de la investidura estaríamos mandando al mundo (y a los
ocho millones de votantes del Partido Popular) el mensaje de que “no todo vale”
En realidad bastaría con el voto en contra de PSOE,
Ciudadanos y Unidos-Podemos que suman 188 diputados
Porque lo más grave de ese partido y esos dirigentes, aparte
de la propia corrupción (que ciertamente también existe en otros partidos), es
que se jactan de ella; Es decir, nos insultan a todos.
Ya sé que la indigencia moral de la mayoría de la clase
política excluye cualquier posibilidad de que algo así ocurra.
Pero los ciudadanos debiéramos echar humo por las orejas si
el partido al que votamos hiciera la mínima concesión a esos sinvergüenzas.
Y yo no quiero callarme.
Ojalá, por una vez (prometo no pavonearme) me equivoque y
ocurra lo que en el enunciado afirmo que “en ningun caso va a ocurrir”
Recomiendo la lectura del este artículo de D. Javier Gallego
que viene a decir lo mismo.
Y como soñar es gratis, además voy a pedirle al “hada del sentido común" que el resto de los partidos, aparcando momentaneamente sus “instintos básicos”, (Despido libre, quema de conventos, nacionalización de la banca, rebajas de impuestos a los ricos, puestos garantizados en los Consejos de administración del IBEX-35, etc) se pusieran de acuerdo para exigir a quien gobierne las cuatro siguientes cosas:
1ª Fin del saqueo y descapitalización del Sistema Nacional de
Seguridad Social.
2º Derogación de la ley de enjuciamiento criminal (Para que
no se escapen los corruptos por la gatera de la “prescripción” o el “archivo
definitivo”)
3º Ampliación del plazo para el recorte del Déficit Público y
corrección del mismo a base de recaudar impuestos de las rentas empresariales,
rendimientos del capital y lucha contra el fraude y la elusión fiscal.
4º Derogación de la última Reforma Laboral, la Ley de
Educación y la Ley “Mordaza”.
Es todo tan de sentido común que nadie que lo tenga (unido a
una mínima docis de decencia política y moral) debiera oponerse.
Saludos.
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