Acabo de “visionar” un video (un tanto repugnante) mediante
el que la empresa “Rann Safaris” se anuncia exhibiendo, repetitivamente, el miserable
asesinato (de un tiro en la frente) de
unos hermosísimos ejemplares de elefante africano por parte de un sujeto con
quien nuestro monarca ha tenido a bien posar junto a otro ejemplar abatido por
cualquiera de ambos dos individuos, tanto da.
Ahora nos enteramos de que El Rey, que tan preocupado
anda por las dificultades que están pasando sus “súbditos”, no ha tenido más
remedio que marcharse a olvidar las penas a Botsuana buscando dios sabe qué
pobres animales y en compañía de quien sabe qué otros “animales” (bípedos).
Y el pobre hombre (el Rey) a las 5 de la madrugada,
imagino que mientras buscaba el orinal para aliviar la próstata, ha dado un mal
paso y se nos ha roto la cadera.
No es cosa de burlarse de la desgracia ajena y,
desde este texto, les deseo una total y pronta recuperación, a Usted y a su
joven nieto (¡Ay, la caza!).
Pero ello no es óbice para decirle, también, que siento
vergüenza (propia) por tener en la representación del Estado de mi país a un "Señor" que tan mal le representa.
Que tiene aficiones y gustos algo peor que dudosos; y que anda por ahí dando tumbos como si aún
estuviéramos en el siglo XVIII y este país fuese “su reino”.
Que me parece impropio de un representante público y
un mal ejemplo, con la que está cayendo, andar “de flor en flor” como las
abejas persiguiendo y cazando presas, sean éstas de la especie que sean.
Que me parece de muy mal gusto andarse fotografiando
junto a un matarife que, armado de algo parecido a un “bazooka”, va por ahí aniquilando
hermosos animales indefensos y presume como si fuera un cazador.
Y, sobre todo, que aunque no rebajo una coma lo
antedicho, le agradezco sinceramente el descrédito que, por mérito propio y con
la ayuda de algunos de sus familiares, va acumulando sobre su persona y la
institución que representa, ya que sin duda ayudará a muchos ciudadanos a poner
en su justo valor la Monarquía.
Hoy 14 de abril, Majestad, entre Usted y nosotros,
cada cual a su manera, estamos ayudando al “advenimiento” de la III República.
Gracias, Majestad.
Y que todos podamos verlo.
Pedro González
1 comentario:
Bien Pedro. Siempre aciertas pero este lo has bordao.
Enrique
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