A
lo que parece, además de colocar parte de sus dineros en un “paraíso fiscal”,
nuestro (aunque a alguno nos pese) monarca parece decidido a colocar a su
yerno en un “paraíso penal”.
Comprendo
que efectivamente dicho sujeto es un verdadero estorbo, además de un serio
peligro. Y si yo pudiera haría lo mismo.
Lo
que no me parece tan comprensible es la connivencia y complicidad de fiscales,
jueces, políticos y periodistas que, además de no intentar impedirlo, en
algunos casos contribuyen como pueden a posibilitarlo o a hacernos tragar esta
nueva rueda de molino.
Incluso,
algunos, le reirán la gracia.
Maldita
la que tiene.
¡Fuera
los ladrones de las Instituciones!
Y, entremedias, el "Supremo", haciendo la vista gorda (en el asunto de los trajecillos)
Mal vamos.
Y, entremedias, el "Supremo", haciendo la vista gorda (en el asunto de los trajecillos)
Mal vamos.
Saludos.
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