No confundir con “motor de agua”
Un señor Cura (excelente buena, buena, persona y
viejo amigo mío) me manda este vídeo junto con un texto que hace el panegírico
de las excelencias del “invento”
Un servidor, aunque sin una formación
excesivamente "sólida", ni tampoco “brillante”, tiene ya, por edad, y por el conocimiento a que le obliga
la actividad a que se dedica para “comer a diario”, el suficiente escepticismo
como para “dudar” hasta de la misma existencia del “tiempo” si preciso fuera.
Pero como tengo la mala costumbre de revisar la
mayor parte del material que se me envía, abrí el vídeo en cuestión y, en mi
humilde opinión, considero que el señor Marc Parent anda bastante bien
encaminado.
Y, tal y como me ha comentado otro amigo, que de
estos temas entiende algo más que yo y cuya imaginación es más fértil
(reproduzco más abajo, supongo que con su permiso, su texto), el “invento”
puede tener mucho más recorrido de lo que parece. Y no me parece que (mi segundo
amigo) esté diciendo ninguna tontería
Queda a vuestra disposición y estaré atento por
si alguien razonadamente me “apea del burro de mi posible ingenuidad y tengo que “des-decirme”.
Mi padre decía que el verdadero mérito de Fleming, cuando descubrió
la penicilina, fue darse cuenta de lo que significaba un fenómeno natural como
era que los hongos arruinasen los cultivos de bacterias que hacían en las
placas de Petri. Cosa que, por aquel entonces, tenía cabreados a todos los
investigadores.
Fleming debió pensar
algo así:"mushrooms are fucking Petri plates then kill bacteria". (Esto si lo pronunciáis con el acento de Aznar el de la Columbia
Unvty. queda de puta madre)
Pues bien, todos
hemos visto como en las bombas de calor se llena de agua la bandeja de
condensados (y el consiguiente coñazo para desaguarla y que no desprenda olor
cuando se vacía, etc.)
Este gabacho se ha
percatado en su casa de Tahití (el sitio debe ser inspirador de cojones) que
ese inconveniente puede ser una gran ventaja.
Efectivamente creo
que su salida es muy buena en situaciones de emergencia, campamentos de
refugiados, etc.
No obstante,
atravesando la Pampa en coche y viendo aquellas enormes extensiones donde solo
crecían matorrales de sacrificio, pensé el magnífico huerto solar que se podía
hacer. Alguien muy sensato, me dijo que para que ibas a producir electricidad
si allí no había quien la consumiera y las pérdidas de carga en transporte iban
a ser considerables.
Ahora se me ocurre
(y quizás sea una gilipollez) que mediante grandes ventiladores y huertos
solares podemos producir cantidades notables de agua, no sólo para abastecer a
los necesitados sino para con técnicas de regadío modernas (goteo,
microdifusión, etc.) e invernaderos poner en valor terrenos que son desiertos.
El interés de los
Jeques por estos inventos demuestra que, parafraseando otra vez al hombrecillo
insufrible (como le llama Manolo Saco) "They
are extravagants men, but they arent stupids", han aprendido hace tiempo que la energía y el agua son el poder y
se están gastando la pasta en hacer ciudades sostenibles con energías
alternativas: geotermia, solar, fotovotaica y eólica. Y no es porque les falte
petróleo precisamente, sino porque saben que cuando haya poco petróleo este
será (ya lo es) más útil para hacer materiales sintéticos que para quemarlo.
De ahí mi oposición a la energía nuclear de fisión. Si la pasta que
nos gastamos en hacer centrales de fisión se gastase en investigar y
desarrollar otras fuentes de energía (incluída la fusión) otro gallo nos
cantaba.
Sirva de ejemplo el SIDA. Cuando los agoreros hace 30 años lo
calificaban de la peste del siglo XX, los gobiernos potenciaron la investigación
y hoy nadie se muere de SIDA (salvo si es negro o pobre, que entonces no es
problema y además es conveniente, pero eso es otro debate y para otro día)
Salud
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