Me llega un correo con el enlace que te ofrezco
a continuación, haciendo referencia al “caso islandés” (y bastante más)
Al tal respecto, hago cuatro apuntes:
1 Se
trata de una nueva dirección de internet que tiene toda la pinta de ser un “sitio”,
solvente, bien escrito y bien contado.
2
El texto que se incluye en el “pinchazo” del enlace es bastante largo, pero
tiene la virtud (sobre todo para quienes, por no conocer el asunto a fondo, tan
pronto opinan una cosa como la contraria, dependiendo de “Quien les cuente Qué”),
de ofrecer una panorámica bastante nítida y bien argumentada de todo el
entramado de los “rescates” que la Unión Europea y “los Mercados” vienen
perpetrando contra los países más débiles e incautos, con la connivencia (en
nuestro caso casi parece “entusiasmo”) de nuestro propios gobiernos
3 Al
margen del caso concreto de Islandia, la gracia del texto, en mi opinión, está
en dos aspectos que toca casi “de puntillas” como lo son: el que la tan
cacareada amenaza de llevar a Islandia a “los tribunales” es muy posiblemente
“un brindis al sol” ya que Islandia (gracias a los dos referéndum) nunca ha
llegado a aprobar legalmente el pago del “chantaje” y el, no menos importante,
de que La Unión Europea y el Sistema Financiero están, muy probablemente que
“no les llega la camisa al cuerpo” al pensar que pudiera cundir el ejemplo y encontrarse
con una situación similar a la de la negativa de Argentina, que como todos
sabemos no ha desaparecido aún del mapa pese a haberse negado a pagar los
créditos de los dineros que Menem y sus compinches robaron al país y colocaron
en Suiza mientras el Estado se iba “al garete”
Y 4,
y seguiré insistiendo en ello: Es conveniente ir impulsando una campaña
“europea” de desobediencia civil y exigencia de responsabilidades por todas
estas plagas provocadas por el mundo financiero y que pretenden que paguemos los
ciudadanos a costa de renunciar a nuestro futuro.
Saludos.
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