Hola otra vez.
Luis García Montero vuelve, una vez más, a llamar mi
atención en el preciso momento en que, como un pardillo, estaba mirando el dedo
del Tribunal Supremo denegando las subvenciones a los colegios segregacionistas.
Y creyendo
que ése era “fondo del asunto” en lugar de fijarme en el despropósito que es el
dar por sentado que, si te lo puedes pagar con tu propio dinero, puedes
hacer lo que te venga en gana en un
asunto como la Educación (así con mayúscula).
Pongo el texto a disposición de quien pueda
interesarle
Y aprovecho para decir que rectifico mi anterior opinión
sobre el ministro D. Ignacio Wert:
No es un cantamañanas oportunista como yo
creía.
Es algo bastante peor.
Es un cínico (inmoral) aunque ande disfrazado de
patán.
Tenía ganas de soltarlo desde hace tiempo y la ocasión viene al pelo.
Del Sr. Gallardón ya hablaremos, merece un capítulo aparte.
Saludos.
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