Confío en no
estar infringiendo las leyes de Propiedad Intelectual, ni lesionando los
Derechos de Autor.
Pero
es que la interpretación que hace D.
Andrés Rábago (“el Roto”) en el diario El País del consejo evangélico es de
lo más descriptivo de la perversión del lenguaje (y la desfachatez de muchos) y
me parece un buen motivo de meditación para estos días.
Para
los perezosos que presumen de no pinchar jamás un enlace dejo aquí la imagen.
Saludos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario