Ha
cumplido 94 años pero es mucho más joven que la mayoría de nosotros.
Y
también más sabio, más lúcido, y más optimista.
Más
Optimista?.
Sí,
su lucidez y su conocimiento de que, por el camino actual, “no hay salida” puede
parecer una opinión pesimista.
Pero si uno no le tiene miedo a nada (como él), si uno tiene la humildad y la decencia de saber situarse con los pies en el suelo y no creerse “el ombligo del mundo”, entonces, desde esa perspectiva, aunque uno sepa que por esta senda no vamos a parte alguna, uno es un optimista.
Pero si uno no le tiene miedo a nada (como él), si uno tiene la humildad y la decencia de saber situarse con los pies en el suelo y no creerse “el ombligo del mundo”, entonces, desde esa perspectiva, aunque uno sepa que por esta senda no vamos a parte alguna, uno es un optimista.
. .
. . “Progreso es una palabra que
implica un fin, un objetivo, como en un viaje. ¡Pero aquí no saben dónde van!
No sólo no saben dónde van, lo malo es que ni siquiera saben dónde quieren ir.
Sarkozy, Berlusconi y otros que prefiero no nombrar en castellano y en inglés
no saben lo que quieren. Vivir en paz es un objetivo, pero para eso deben
educarnos y estamos haciendo todo lo contrario.” . . .
.
. . . “El
matemático Poincaré decía: “El caos es un orden que no conocemos”. Pues ahora
estamos en un orden que no conocemos. ¿Y qué perspectivas hay? Pues el próximo
orden. ¿Cómo será? No lo sé. Tengo mis ideas, pero no lo sé”.
Hablo
de D. José Luis Sampedro Saez, catedrático
de Estructura Económica de la Universidad Complutense de Madrid y, desde mi
personal punto de vista, una de las cabezas más lúcidas y personas más decentes
de nuestros últimos cien años.
Pongo
a tu disposición una reciente entrevista que ha realizado el diario Público,
que no tiene desperdicio
Resulta
difícil decir más cosas y más serias, con menos palabras,
Lo
dicho, ¡Qué envidia de hombre!
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